Dentro de los términos financieros que estamos explicando durante esta semana, destacamos uno que es el de las tasas de cambio, que son la cantidad de pesos que se deben pagar por una unidad de moneda extranjera.
Como nuestro blog habla sobre el dólar, esta será la base, y es la base en Colombia, para el cálculo de las tasas de cambio debido a que es la divisa más utilizada aquí para las transacciones con el exterior.
Igual que el precio de cualquier producto, la tasa de cambio sube o baja dependiendo de la oferta y la demanda. Cuando la oferta es mayor que la demanda, es decir, hay abundancia de dólares en el mercado y pocos compradores, la tasa de cambio baja; y cuando hay menos oferta que demanda (hay escasez de dólares y muchos compradores), la tasa de cambio sube.
Es importante destacar que, existen diferentes tipos de regímenes de tasa de cambio:
Tasa de cambio fija
- Dentro de este régimen el Banco Central se compromete a que la tasa de cambio se va a mantener en un valor predeterminado. Si existe exceso de demanda, el Banco suministra al mercado las divisas necesarias para mantener la tasa de cambio en su valor prefijado y viceversa.
Tasa de cambio flexible
- En contrario al anterior, en este régimen el Banco Central se abstiene de intervenir y la tasa de cambio está totalmente determinada por la oferta y la demanda de divisas en el mercado. En este sentido, todo movimiento de la tasa de cambio tiene un nombre. Si se produce hacia arriba se llama devaluación, y si es hacia abajo, revaluación.